Hoy miraba el calendario haciendo cuentas para ver cómo me tengo que organizar el tiempo y la verdad es que o me apremio o empezaré a ir pillado, sí, lo confieso, estoy liao.
En cada semana de aquí a mediados de enero tengo algo que hacer, que entregar o que estudiar, además del curro de por las tardes, todo eso mezclado con unas ganas de bajar a Málaga increíbles, hace (extrañamente) que el tiempo vuele llevándose las semanas así a lo tonto.
A lo tonto lo que han pasado han sido tres años y pico desde que me trasladé a Madrid.
La de momentos vividos durante este tiempo, que ni se me pasaban por la cabeza cuando estaba estudiando en el despacho de mi padre para las recuperaciones de Segundo de Bachiller, planteándome si elegir una Ingeniería, o si apostar por el Derecho...
No se exactamente qué cable se me cruzó, si fue el azul, el verde o el colorao, pero acabé en la capital de España para intentar ser periodista, y la verdad es que me alegro de esa fugaz conexión.
No se a cuento de qué ha venido todo esto, pero estaba aquí solo, me ha entrado la melancolía y os tenía que hablar.
Comentarios
jaja
yo tb ando pillada ya de tiempo, por lo menos hasta el 12 de diciembre, y luego ya a estudiar los miles de exámenes que tendré en enero... buf.
Yo voto x la opción "fuga a un país cálido y lejano" (málaga concuerda con la descripción...)